En enero de 2015, el presidente mexicano Enrique Peña Nieto utilizó nuevos poderes presidenciales de perdón el mismo día en que entraron en vigencia para liberar al maestro de la escuela maya Alberto Patishtán Gómez. Las autoras Shannon Speed y Rosalva Aída Hernández Castillo reflexionan sobre las similitudes entre el caso Patishtán en México y el caso Leonard Peltier en los Estados Unidos. Patishtán había estado encarcelado durante 13 años tras un juicio plagado de irregularidades y violaciones de sus derechos constitucionales. El 31 de octubre, utilizando los nuevos poderes presidenciales de indulto el día en que entraron en vigencia, el presidente mexicano Enrique Peña Nieto indultó al maestro de la escuela maya Alberto Patishtán Gómez, quien había estado encarcelado durante 13 años después de un juicio plagado de irregularidades. Condenado a 60 años de prisión por su ostensible participación en una emboscada en la que fueron asesinados siete policías, Amnistía Internacional y organizaciones de derechos humanos en todo México y el mundo denunciaron su injusto encarcelamiento. Su caso es uno de los muchos en los que el sistema legal sirvió a los intereses de grupos con poder político y demuestra cómo el racismo estructural continúa generando falta de acceso a la justicia para los pueblos indígenas, en México y en todo el continente americano.